¡Hola!
Tengo 50 años, soy madre de una joven de 28 años y de un joven de 26 años.
Me desempeño como Terapeuta Integral hace 18 años y cuento con más de 35 años de experiencias a nivel personal en temas relacionados a la metafísica, magia elemental, tarot, canalizaciones, clarividencia, parapsicología y sucesos paranormales.
Mi propósito ha sido acompañar a las personas a descubrir y construir su sanador interno, compartiendo herramientas y técnicas que facilitan el entendimiento y comprensión de la historia personal y familiar, necesarios para la toma de consciencia, el bienestar y el desarrollo del sentido de su vida. Dicho acompañamiento lo realizo a través de habilidades y técnicas que integran el cuerpo, la mente y emociones, lo espiritual/energético y la herencia ancestral.
Al estar dolidos y condicionados, nos olvidamos de nuestros sueños de niñxs y de nuestro poder de crear la realidad que deseamos y que vinimos manifestar.
Para sanar es necesario ir hacia dentro, ir a ver lo que nos duele y desconocemos de nuestra personalidad para dejar ir, para recuperarse, para repararse, para resolverse y rescatarse.
El autoconocimiento nos permite conocernos en profundidad y reconocer como nos vemos y nos tratamos y de donde provienen nuestras creencias limitantes.
Se hace muy necesario acompañarse en ciertas etapas del camino para que se nos revele aquello que no vemos o negamos de nosotrxs.
Y es fundamental ser sostenidxs para cuando sintamos en nuestro interior que no entendemos nada y estamos sobrepasados.
Necesitamos de un apoyo, una guía para crecer y sanar. Y así, cuando nos sintamos listxs, poder caminar solitxs y con la voluntad de crear eso que ya hemos reconocido bien merecer.
Todo lo anterior es puro Amor, del propio y del que das y recibes. Es Evolución de Consciencia.
Y es así como sanamos, siendo acompañados, colaborándonos, mirándonos en los ojos de otrxs, aceptando las experiencias, aprendiendo del amor que brota en nuestra humanidad.
Esto es lo que he aprendido en mi propia Sanación y sigo sanando, ya que este camino es para toda la vida.
Deseo aportarte con mi experiencia y conocimientos. Es por ello, que te comparto por este medio lo que sé y creo te pueda ayudar.
El Camino con Corazón vibra en mi interior.
Mi historia
Desde pequeña poseo habilidades como canalizadora, clarividente y armonizadora energética del aura, objetos y ambientes. En mi caso, la clarividencia que poseo me permite percibir datos registrados en las energías que irradian las personas y las cosas sobre la memoria inconsciente personal y colectiva, donde mi cerebro lo decodifica o lo traduce en formas de imágenes, sensaciones, sonidos y pensamientos para poder entregar la información.
A temprana edad busqué entender mi propio ser e historia personal, dándole algún sentido a mi existencia. Por ello, hace años inicié mi camino como Terapeuta Transpersonal, buscando entender el sentido de la vida, el mecanismo de nuestra psique y espiritualidad, a nivel individual y colectivo, para reencontrarme y ayudar a otros a reencontrarse, ya que siempre soñaba salvando al mundo jeje
Sin tomar en cuenta el gran paso que daba en el 2012 al auto-consagrarme en la montaña a la Madre Tierra y a la Gran Diosa, e incluso tatuarme aquel compromiso en busca de la recuperación de mi Femenino, inicié un camino impensado, donde la intuición, la sincronía, los sueños lucidos y la magia de la naturaleza se manifestaron a cada paso, transformando mi interior y en consecuencia a mi entorno.
En la medida que avanzaba en mis estudios y experiencias, aún no lograba alcanzar esa comprensión que me permitiría darle un sentido a mi vida y encontrar la liberación de mis heridas. Me sometí a distintas terapias que me ayudaban, pero no lograban lo que buscaba. Fue entonces que, a finales de 2014, conocí a un curandero vegetalista que me me dijo "te están llamando" al contarle un sueño repetitivo que me acompañaba hace algún tiempo y recordé mi compromiso realizado en la montaña.
Me demoré unos meses en tomar la decisión de entregarme a ese llamado y experimentar por primera vez, en mayo 2015, con Ayahuasca y purgas con plantas medicina. Fue tan potente la experiencia y tan liberadora que seguí asistiendo, para luego, someterme a tratamiento como paciente de medicina vegetalista con acompañamiento psico-terapéutico. Gracias a ello, he comprendido la importancia de ser acompañada y contenida para integrar sanamente la historia personal dolorosa, para lograr un estado de armonía y paz interior que conlleva al bienestar y al descubrimiento del "sentido", entendiendo el funcionamiento y evolución de nuestra psique, lo que permite el contacto con nuestro Ser Esencial, el acceso al conocimiento de uno mismo, un conocimiento que implica día a día seguir observándose, amándose y creciendo.
En este camino de sube y bajas profundas para sanar, me reencontré con mi Niña Interior, una dulce, amorosa y juguetona niña, y que grata sorpresa me llevé al comenzar a reconocerla. Tuve muchos recuerdos, tanto bellos como dolorosos y pude al fin aceptarme y reconocerme AUTISTA y con TDAH (diagnosticada a los 48 años). Digo aceptar, porque a lo largo de mi vida, en algunas ocasiones me lo comentaron, pero no quise someterme a evaluaciones, pues parte de mis heridas era evitar el rechazo por ser diferente. Me adapté tanto que me había olvidado de esa dulce niña, al punto de rigidizarme, incrementando el estrés y la ansiedad. Hoy me siento libre, la veo y la disfruto. Y, además, por mi experiencia he podido orientar a otras personas autistas adultas y padres de autistas a aceptar lo que somos y aprender sobre como percibimos el mundo para una sana convivencia.
Con tantos años de camino en la sanación, me considero una Mujer Afortunada, Bendecida, Danzante y Medicina, es decir, una Mujer Sana, al acoger y comprender mi historia de vida, a mi bella y alegre niña interior, mi mujer salvaje y mi sabia interna, por permitirme día a día sentir y amar mi vulnerabilidad acogiendo mis heridas, mi humanidad, mis raíces y frutos. Por ello, mi camino me lleva a compartir con otros seres humanos, especialmente mujeres, la importancia de la sanación, para recuperar nuestro poder y mejorar nuestra calidad de vida, siendo conscientes de que somos co-creadores de nuestra realidad, y ayudando al mismo tiempo a recuperar nuestra conexión con la Madre Tierra y nuestro Hogar.
La Sanación es un tremendo camino de autoconocimiento sin fin, donde todos somos medicina danzando en la ciclicidad de la vida, donde todos se liberan si tú y yo sanamos.